El volcán Llullaillaco es cosa seria, un desafío sólo para montañistas experimentados.

Considerado uno de los cuatro volcanes más altos del mundo, este macizo de perfiles escarpados se encuentra en la frontera entre la Región de Antofagasta (Chile) y Provincia de Salta (Argentina).

Para llegar a su base por el lado chileno, muchos andinistas prefieren trasladarse en camionetas o 4 X 4 debido a las malas condiciones del camino.

Desde ahí, comienzan el ascenso hasta el campamento base que levantarán a unos 4600 metros de altura.

Las inesperadas tormentas de nieve que se experimentan en la subida continuamente ponen fin a muchas de las misiones que pretenden conquistar los 6739 metros que registra este volcán.

Otro obstáculo que también desalienta a los montañistas es el peligro que yace en los campos minados presentes en la base del macizo.

Por eso, es de vital importancia ir acompañado de un guía y seguir las señalizaciones del camino que atraviesa el parque Llullaillaco.

El volcán Llullaillaco también es conocido por el secreto que escondía a 26 metros de su cima y que en el año 1999, el equipo de National Geographic reveló al mundo: un grupo de niños momificados con 500 años de antigüedad que se encontraban en perfectas condiciones, testigos silenciosos de lo que fue el glorioso imperio inca.